Este año nos encontramos ante un curioso fenómeno. La tendencia es la no-tendencia.
La trepidante aceleración de la moda ha provocado que no existan tendencias claras, que la tendencia sea que prácticamente se lleve todo.
Antes tardábamos más de diez años en volver a ver zapatos de punta afilada, en subir el largo de las faldas, en que el bajo de los pantalones estuviese por encima del tobillo o rozando el suelo.Ahora parece que todo convive: puntas con plataformas, minis con maxis, capris con pata de elefante, sedas vaporosas con encaje, colores flúor con pasteles...
El concepto cambió un incierto día en el que el ir a comprar ropa pasó de ser una necesidad a convertirse en hobbie, una ocupación de tiempo libre, en una diversión. Después de eso, ya nunca pudimos vernos iguales: no sé bien si nos convertirmos en sus víctimas o fue a ella la hicimos víctima nuestra. De la moda hablo, claro.
En lo primero que lo advertí fue en los bolsos. ¿Cuáles se llevan? Pues casi todos: los totes (extragrandes), las carteras, los que se cuelgan, los que llevan cadena... A ellos siguió todo lo demás.
La moda, no nos engañemos, es fundamentalmente un negocio para ganar dinero. Consiste en convencer al gran público de que cualquier cosa se lleva y que lo anterior ya está pasado. ¿Por qué? Para crear esa necesidad de lo-quiero-ya y que sigas comprándote los mismos zapatos negros pero esta vez con la punta no sé cómo. Si todos fueran iguales y ya los tuvieras, ¿para qué te comprarías otro par más? La respuesta está muy clara: porque se llevan.
El sector de la moda crece y crece. Cada vez hay más marcas que compiten entre sí, ya sea de lujo o low cost, y que además lanzan diversas colecciones al año. Como desde Balenciaga todo está prácticamente inventado y por desgracia no hay tantas cabezas pensantes con talento que realmente puedan considerarse genios innovadores en el universo fashion (Alexander McQueen, desgraciadamente, murió), ha llegado un momento en el que "vuelve" a llevarse lo que nunca dejó de llevarse. Han conseguido que el movimiento pendular deje de oscilar.
¿Queréis pruebas? Las rayas vuelven después de sólo tres años; el blanco, ¿alguna vez ha dejado de llevarse el blanco en verano? -lo mismo que el negro en invierno-; a los colores ácidos, les pasa lo mismo que al blanco; respecto a los colores pastel -que parece que fue lo propio el año pasado-, este año tampoco era cuestión de volver a los fuertes, que están sólo a dos años, ¿solución? Se llevan todos; y no hablemos del denim. Como alguien me vuelva a decir otra vez que el denim es lo último, quemo todos mis vaqueros y le quemo también los suyos.
La paradoja es que acelerando tanto la cuestión han conseguido que me compre menos ropa porque la que supuestamente se lleva ya la tengo y encima la tengo nueva. Hay que ver qué cosas.
Dos reflexiones al respecto:
1. Estoy volviendo a mis orígenes, que siempre fueron crear un look, verme distinta, gustarme y pensar menos en qué se lleva o no.
2. Ahora he decidido que sólo voy a comprarme prendas que sean de verdad especiales y diferentes (A ver cuánto me dura).
3. Queriendo vender más, a mí han conseguido venderme menos. Que ya es decir.
Under the photos, English version
Trends for Spring? Today everything is on trend. Year after year, fashion is changing more and more, but the aceleration has been such a fast question that nowadays it´s all the same: white in summer, black for winter, acid colors or pastel for summer both together; red for winter, capri pants at the same time as cropped ones; lace dresses or satin dresses, platform or flats...
I´ve decided I´m going to purchase only those for-ever clothes that are really special. Why? Because they are for all your life and are, definitely, on trend always.
Imágenes: Net-a-Porter
La trepidante aceleración de la moda ha provocado que no existan tendencias claras, que la tendencia sea que prácticamente se lleve todo.
Antes tardábamos más de diez años en volver a ver zapatos de punta afilada, en subir el largo de las faldas, en que el bajo de los pantalones estuviese por encima del tobillo o rozando el suelo.Ahora parece que todo convive: puntas con plataformas, minis con maxis, capris con pata de elefante, sedas vaporosas con encaje, colores flúor con pasteles...
El concepto cambió un incierto día en el que el ir a comprar ropa pasó de ser una necesidad a convertirse en hobbie, una ocupación de tiempo libre, en una diversión. Después de eso, ya nunca pudimos vernos iguales: no sé bien si nos convertirmos en sus víctimas o fue a ella la hicimos víctima nuestra. De la moda hablo, claro.
En lo primero que lo advertí fue en los bolsos. ¿Cuáles se llevan? Pues casi todos: los totes (extragrandes), las carteras, los que se cuelgan, los que llevan cadena... A ellos siguió todo lo demás.
La moda, no nos engañemos, es fundamentalmente un negocio para ganar dinero. Consiste en convencer al gran público de que cualquier cosa se lleva y que lo anterior ya está pasado. ¿Por qué? Para crear esa necesidad de lo-quiero-ya y que sigas comprándote los mismos zapatos negros pero esta vez con la punta no sé cómo. Si todos fueran iguales y ya los tuvieras, ¿para qué te comprarías otro par más? La respuesta está muy clara: porque se llevan.
El sector de la moda crece y crece. Cada vez hay más marcas que compiten entre sí, ya sea de lujo o low cost, y que además lanzan diversas colecciones al año. Como desde Balenciaga todo está prácticamente inventado y por desgracia no hay tantas cabezas pensantes con talento que realmente puedan considerarse genios innovadores en el universo fashion (Alexander McQueen, desgraciadamente, murió), ha llegado un momento en el que "vuelve" a llevarse lo que nunca dejó de llevarse. Han conseguido que el movimiento pendular deje de oscilar.
¿Queréis pruebas? Las rayas vuelven después de sólo tres años; el blanco, ¿alguna vez ha dejado de llevarse el blanco en verano? -lo mismo que el negro en invierno-; a los colores ácidos, les pasa lo mismo que al blanco; respecto a los colores pastel -que parece que fue lo propio el año pasado-, este año tampoco era cuestión de volver a los fuertes, que están sólo a dos años, ¿solución? Se llevan todos; y no hablemos del denim. Como alguien me vuelva a decir otra vez que el denim es lo último, quemo todos mis vaqueros y le quemo también los suyos.
La paradoja es que acelerando tanto la cuestión han conseguido que me compre menos ropa porque la que supuestamente se lleva ya la tengo y encima la tengo nueva. Hay que ver qué cosas.
Dos reflexiones al respecto:
1. Estoy volviendo a mis orígenes, que siempre fueron crear un look, verme distinta, gustarme y pensar menos en qué se lleva o no.
2. Ahora he decidido que sólo voy a comprarme prendas que sean de verdad especiales y diferentes (A ver cuánto me dura).
3. Queriendo vender más, a mí han conseguido venderme menos. Que ya es decir.
Under the photos, English version
Trends for Spring? Today everything is on trend. Year after year, fashion is changing more and more, but the aceleration has been such a fast question that nowadays it´s all the same: white in summer, black for winter, acid colors or pastel for summer both together; red for winter, capri pants at the same time as cropped ones; lace dresses or satin dresses, platform or flats...
I´ve decided I´m going to purchase only those for-ever clothes that are really special. Why? Because they are for all your life and are, definitely, on trend always.
Imágenes: Net-a-Porter